Un reciente estudio realizado por investigadores alemanes reveló un dato alarmante: 1 de cada 4 padres no sabría cómo actuar si su hijo dejara de respirar. En momentos de emergencia, el miedo y el pánico pueden paralizarnos, impidiendo que recordemos los pasos esenciales para salvar una vida.
Es completamente natural sentir angustia en una situación así. Sin embargo, contar con conocimientos básicos en primeros auxilios infantiles puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
¿Por qué es vital conocer estas maniobras?
Los profesionales de la ambulancia del Hospital Saint-Jean han decidido tomar acción y compartir su experiencia con el público. A través de una campaña informativa, explican paso a paso qué hacer si un bebé deja de respirar por asfixia.
“Queremos que todos los padres, abuelos y cuidadores sepan qué hacer durante esos minutos críticos. Por eso pedimos que este conocimiento se difunda”, afirmó el director del equipo de emergencias.
🔴 Caso 1: El bebé está consciente pero no puede respirar
Según Clive James, oficial de emergencias, estos son los pasos a seguir si el bebé está consciente pero se está asfixiando:
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Colocar al bebé boca abajo a lo largo de tu muslo, asegurando su cabeza más baja que el cuerpo.
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Sujetar firmemente al bebé con un brazo y darle 5 palmadas entre los omóplatos, con la palma de la mano.
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Revisar la boca para ver si el objeto ha sido expulsado.
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Si no lo ha sido, girar al bebé boca arriba y aplicar hasta 5 compresiones torácicas.
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Usar dos dedos sobre el esternón y presionar hacia dentro y hacia arriba.
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Si después de tres repeticiones no hay mejora, llamar a una ambulancia inmediatamente y continuar con las maniobras hasta que lleguen los profesionales.
⚠️ Caso 2: El bebé está inconsciente y no respira
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