En una cacerola colocamos 500 ml de leche, dos huevos, 4 cucharadas de maicena, 6 cucharadas de azúcar, lo llevamos a fuego medio y batimos hasta alcanzar la consistencia deseada.
Retiramos del fuego y le agregamos queso mascarpone y mezclamos hasta que esté bien integrado.
Rallamos un limón y exprimimos. Reservamos la ralladura y colocamos el jugo del limón a la crema y revolvemos bien. Reservamos.
En un recipiente colocamos un huevo, 120 gramos de azúcar, la ralladura del limón y mezclamos bien.
Añadimos 320 gramos a la mezcl, 6 gramos de levadura en polvo, 140 gramos de manteca (Cortada en cubitos) y mezclamos con los dedos hasta formar una masa.
Luego sobre un molde de 26 cm previamente enmantecado, dividimos la masa en dos y colocamos una masa sobre la fuente, cubriendo toda la superficie.
Luego pinchamos la masa con un tenedor durante toda la superficie y por encima le colocamos la crema y con la ayuda de una espátula la emparejamos bien. Reservamos
Con la otra mitad de la masa, le ponemos papel por encima y lo estiramos con un palo de amasar. Le hacemos varios cortes con un molde circular por toda la superficie de la masa y la vamos colocando una al lado de la otra cubriendo todo el contorno de la crema de la tarta.
Introducimos la tarta en un horno precalentado a 180°C durante 35 minutos y desmoldamos.
Espolvoreamos azúcar glas por encima y en el centro le colocamos dos rodajas de limón.
Recomendaciones
Para obtener el mejor sabor, utiliza limones frescos y orgánicos. La ralladura y el jugo de limón fresco realzarán el sabor del pastel.
Para intensificar el sabor a limón, puedes mezclar la ralladura de limón con el azúcar antes de incorporarla a la masa. Esto ayudará a liberar los aceites esenciales de la cáscara de limón.