En un recipiente, mezcla el aceite de oliva con la paprika y añade la pimienta, el romero y la sal.
Combina cuidadosamente utilizando una cuchara o un batidor de mano pequeño. Inserta un palillo a través de la papa, desde un extremo hasta el otro.
Corta la papa en espiral y separa las rodajas, reservándolas. Coloca las papas en un recipiente apto para horno y rocíalas con el aceite hasta que estén completamente cubiertas.
Espolvorea generosamente con queso parmesano. Hornea a 350 grados Fahrenheit durante unos 40 minutos o hasta que estén doradas.
Sírvelas y disfruta de su exquisito sabor.
Tips
Selecciona papas de tamaño mediano a grande y de forma homogénea para obtener mejores resultados al realizar cortes en espiral. Las papas más alargadas suelen ser más adecuadas para este proceso.
Emplea un cortador de papas en espiral o un utensilio similar para lograr cortes uniformes y consistentes en las papas. Esto simplificará el procedimiento y asegurará que las espirales tengan un tamaño y grosor uniformes.
Antes de comenzar, asegúrate de lavar minuciosamente las papas y de secarlas por completo con una toalla de cocina para evitar que resbalen al utilizar el utensilio de corte. Este paso también ayuda a eliminar el exceso de almidón de las papas, lo que podría provocar que las espirales se peguen durante la cocción.
Con precaución, introduce la papa en el cortador en espiral y gira para crear las espirales. Asegúrate de aplicar una presión uniforme para obtener cortes nítidos y uniformes. Evita cortar demasiado profundo para evitar separar las espirales.