El afeitado púbico en realidad se originó en el antiguo Egipto y Grecia, cuando las prostitutas tenían que afeitarse por razones higiénicas y como un signo claro de su profesión.
Aunque el afeitado corporal femenino se estableció como norma entre 1915 y 1945, la depilación del vello púbico no ganó fuerza hasta la década de 1980.
Sin embargo, un nuevo estudio muestra que el 60 % de las mujeres sufrió al menos una complicación de salud a causa de la depilación púbica, generalmente abrasión epidérmica (cortes invisibles en la piel) y pelos encarnados. También se demostró que causa irritación cutánea grave, infecciones y, según un estudio anterior, aumenta la propagación y transmisión de ITS.
Estas son las verdaderas razones por las que no debes depilarte el vello púbico:
El vello púbico ayuda a controlar la temperatura corporal.
Todos sabemos que el cabello ayuda a regular la temperatura corporal, pero ¿cómo exactamente? Los folículos pilosos contribuyen a la sudoración.
En cada folículo piloso hay una glándula sebácea que libera aceites sobre el vello, lo que a su vez permite que estos suban a la superficie de la piel. Cuando este aceite se evapora, enfría la piel debido a su calor latente.
El vello púbico en realidad te protege.
El vello púbico te protege de enfermedades y problemas de la piel. Entre otras protecciones, ayuda a evitar que partículas extrañas como el polvo y las bacterias patógenas entren en tu cuerpo.
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