Los últimos momentos de un profesor, pasado corrigiendo las tareas de sus alumnos desde su cama de hospital, han conmovido Internet.

Un recordatorio que impactó a muchos porque resalta lo que muchos olvidan: el trabajo docente no termina con el timbre de fin de jornada. Calificar, preparar las clases y supervisar individualmente a cada estudiante forma parte de su día a día, mucho más allá del horario oficial.

Una publicación ampliamente compartida

La foto se compartió rápidamente miles de veces en redes sociales. Los internautas aplaudieron su compromiso, y algunos incluso compartieron anécdotas sobre profesores influyentes que les habían cambiado la vida.

“Esto demuestra que los profesores nunca cuentan sus horas “, escribió un internauta.
“Gracias a todos estos profesores que nos apoyan mucho más de lo que creemos “, añadió otro.

Más allá de la historia personal, esta imagen se ha convertido en el símbolo de toda una profesión, a veces criticada pero no siempre reconocida en su verdadero valor.

Un homenaje colectivo a los docentes

 

⏬️⏬️ continúa en la página siguiente ⏬️⏬️

Leave a Comment