En un bol, mezcla la levadura, la leche tibia, el azúcar, la mantequilla derretida, los huevos y la esencia de vainilla. Remueve bien hasta disolver completamente el azúcar.
Añade la harina en dos partes, mezclando bien después de cada adición. En la segunda parte, incorpora la sal. Amasa hasta obtener una masa suave y lisa.
Deja reposar la masa durante 30 minutos o hasta que haya duplicado su tamaño.
Extiende la masa con un rodillo y unta una cucharada de mantequilla por toda su superficie. Añade las pasas al gusto.
Dobla la masa por la mitad y vuelve a estirarla con el rodillo. Enrolla solo la mitad de la masa, dejando la otra mitad extendida.
En la parte extendida, corta tiras longitudinales sin separarlas de la masa enrollada. Luego, enrolla las tiras para crear una trenza. Hazlo suavemente para evitar que se rompan.
Continúa enrollando desde donde te quedaste, asegurándote de que todo quede bien trenzado y sin tiras sueltas. Presiona suavemente para verificar que esté firme.
Coloca el pan trenzado en un molde #26 previamente engrasado y deja reposar hasta que duplique su tamaño.
Hornea en un horno precalentado a 180°C durante 35 minutos o hasta que esté dorado y cocido por dentro.
¡Listo para disfrutar en familia!
