Fascitis plantar, dolores articulares, cansancio de los pies tras un día de pie… El jengibre, gracias a sus compuestos antiinflamatorios, puede actuar como un alivio natural para las zonas sensibles. Aplicado directamente sobre las zonas incómodas, alivia la tensión y ayuda a reducir la inflamación.
Cómo incorporar fácilmente este consejo a tu rutina nocturna
Nada podría ser más sencillo:
- Prepare jengibre fresco: córtelo en rodajas o tritúrelo para extraer el jugo.
- Limpie y seque bien sus pies.
- Aplica el jengibre directamente en las plantas de los pies, concentrándote en las zonas tensas.
- Asegúrelo con un paño ligero o una venda si es necesario.
- Déjelo actuar durante 20 a 30 minutos o durante la noche si lo desea.
- Enjuague con agua tibia al despertarse.
Un ritual sencillo, económico y natural para probar a sentir los efectos del jengibre incluso en tus sueños.