1. Ante todo, lavamos bien la herida con agua y jabón. También le aplicamos un ungüento con antibiótico para prevenir la infección.
2. Seguidamente, aplicamos compresas frías.
3. Finalmente, se debe elevar el área afectada.
Luego de dar estos pasos inmediatamente, es fundamental ubicar el tipo de araña que nos pico. Al mismo tiempo, acudiremos de urgencia a un centro de salud para que nos asistan con el mejor tratamiento.