-
Precalentá el horno a 200°C.
-
Lavá y pelá las remolachas (podés usar guantes para no mancharte).
-
Cortalas en cubos o gajos del tamaño que prefieras.
-
En un bowl grande, mezclalas con el aceite, la sal y la pimienta hasta que estén bien cubiertas.
-
Distribuí en una bandeja para horno con papel manteca.
-
Horneá entre 30 y 40 minutos, dándolas vuelta a mitad de cocción.
-
Si usás tomillo, agregalo en los últimos 10 minutos.
-
Serví caliente, o dejalas enfriar para ensaladas o guarniciones.
Consejos para servir y conservar
Cómo servirlas:
Las remolachas asadas quedan perfectas en ensaladas, bowls con cereales integrales, o como guarnición para carnes y pescados. Una combinación ideal es con rúcula, queso de cabra y una vinagreta simple.
Conservación:
Guardalas en un recipiente hermético en la heladera hasta 4 días. También podés freezarlas una vez cocidas: dejalas enfriar, cortalas en rodajas o cubos, y almacenalas hasta 6 meses.
Variantes para sumar remolacha a tu dieta
-
Ensalada de remolacha: mezclá con queso feta, nueces y un chorrito de aceto balsámico.
-
Jugo natural: licuá remolacha (cruda o cocida) con manzana, jengibre y zanahoria.
-
Sopa de remolacha: cocinala con caldo de verduras, cebolla y ajo, y procesá para obtener una crema suave.
-
Chips al horno: cortá láminas finas, rociá con aceite de oliva y sal, y horneá a 180°C durante 20-25 minutos.
Preguntas frecuentes
⏬️⏬️ continúa en la página siguiente ⏬️⏬️