Esta bebida tradicional a base de cúrcuma, leche y jengibre tiene propiedades antiinflamatorias que pueden aliviar dolores articulares y musculares. Al consumirla regularmente, puede contribuir a reducir molestias que limitan el movimiento y mejorar la circulación.
3. Jugo verde con espinaca y plátano
La espinaca es rica en magnesio y potasio, minerales esenciales para la función muscular. El plátano aporta energía rápida y más potasio, mientras que un poco de limón y jengibre activan la circulación. Es una bebida revitalizante que apoya la fuerza y la resistencia.
Consejo adicional: No basta solo con las bebidas. Para obtener resultados duraderos, es importante acompañarlas con ejercicio regular, especialmente actividades que fortalezcan las piernas como caminatas, subir escaleras o ejercicios de resistencia.
