Parece que tengo una especie de aversión a hervir los fideos de lasaña, y es precisamente por eso que una lasaña en sartén es la lasaña perfecta para mí. A diferencia de una lasaña tradicional, en la que hay que pasar bastante tiempo precocinándola y colocándola en capas, una lasaña en sartén se prepara en tan solo treinta minutos y, como ya habrás adivinado, en una sola sartén. Y esta lasaña en sartén en particular es mucho más deliciosa de lo que cualquier lasaña merece ser, ya sea en sartén o no. Tiene una salsa cremosa inspirada en la salsa Alfredo, pollo salteado jugoso y espinacas terrosas. Me encanta, a mi familia le encanta, no puedo imaginar que a alguien no le guste. Y no está de más que sea muy sencilla de hacer.
Comenzarás cocinando las pechugas de pollo en la misma sartén que usarás para el resto de la receta. Solo tienes que sazonarlas, dorarlas en un poco de aceite de oliva y luego cocinarlas a fuego lento en un poco de caldo de pollo hasta que estén bien cocidas. Luego, déjalas a un lado por un rato mientras comienzas a trabajar en los demás componentes.
Ingredientes:
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 pechugas de pollo deshuesadas y sin piel
- 2 1/2 tazas de caldo de pollo
- 1 1/2 tazas de crema espesa
- 1 cucharadita de albahaca seca
- 1/2 cucharadita de ajo en polvo
- 10 fideos de lasaña
- 1 1/2 tazas de queso mozzarella rallado
- 1/2 taza de queso parmesano, recién rallado
- 2 tazas de hojas tiernas de espinaca
- Sal kosher y pimienta negra recién molida, al gusto.
Instrucciones:
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