Hay fotos que dicen más que mil palabras. Una de un profesor acostado en su cama de hospital mientras calificaba las tareas de sus alumnos circuló recientemente por internet. Compartida por su hija, la imagen se volvió viral rápidamente y despertó un profundo respeto y aprecio por la profesión docente.
Una imagen que lo dice todo
El profesor acababa de ser hospitalizado por un problema de salud. Sin embargo, a pesar del cansancio y las limitaciones médicas, se había asegurado de llevar su portátil y su cargador. ¿Su objetivo? Seguir corrigiendo las tareas de sus alumnos, como hacía cada semana.
En la foto que compartió su hija, aparece concentrado, con bolígrafo en mano, rodeado de sus cuadernos y computadora. Una escena aparentemente sencilla, pero que ilustra la pasión y el compromiso discretos de los docentes.
Un testimonio de su compromiso con su profesión.
Su hija, Sandra, acompañó la foto con un mensaje:
“Los profesores dedican muchísimas horas extra, a menudo invisibles. Incluso en medio de una crisis, incluso cuando están agotados, siguen preocupándose por sus alumnos”.
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